miércoles, 2 de julio de 2008

Amor & LibertaD

Tantas veces hemos creído amar en nuestra vida, que a estas alturas ni siquiera estamos seguros de si todo eso ha sido un sueño. No sabemos si volveremos a amar alguna vez, o incluso dudamos de la existencia del susodicho “amor”

Sin embargo, cuando hemos tenido ese extraño sentimiento también hemos sufrido ahogados por cientos de dudas, probablemente más que cuando no estábamos enamorados.

-La obsesión.

¿No es cierto que, en la primera etapa, te preguntaste cientos de veces si esa persona compartía tus sentimientos? Sí, todos nos lo hemos preguntado tantas veces en la vida, muchas de ellas sin darnos cuenta de que estamos tan ciegos y queremos ser tan exigentes que no notamos que esa persona definitivamente nos ama. Después nos quejamos en el momento en que él o ella se cansa y nos da la espalda en busca de alguien más, dejándonos con el corazón destrozado y a merced de una situación irremediable.

-El temor.

Algunas personas afortunadamente se ven libres de esto, pero la mayor parte sufre más de una vez de terribles celos por cosas insignificantes, como si pretendiéramos que nuestra pareja -o peor aún, si ésta aún no lo es- pasara cada instante de su vida pensando en nosotros. Eso es imposible, y si alguien se ve forzado a pasar demasiado tiempo con una sola persona, esto solo le va a empujar y a alejar con gran velocidad de cualquier sentimiento positivo. Esto es algo que todos deberíamos entender; si alguien te ama no va a necesitar cadenas para permanecer atad@ a ti.

-La rutina.

Probablemente la etapa más terrible y difícil de superar en cualquier relación. El aburrimiento nos encara como un enemigo sutil e invisible que se apodera de cada momento y cada sonrisa forzada, impidiéndonos discernir el momento exacto de su llegada. ¿Cómo saber si ya hartamos a la otra persona, si estamos siendo demasiado agobiantes? ¿Se trata de hablar todos los días o hay que tomar un descanso? En mi opinión, los descansos son necesarios, siempre y cuando se sepa cuando tomarlos. Nunca hay que presionar ni cansar a la otra persona; siempre hay que dejar un tema, una palabra, algo para la próxima vez. Pero, contrariamente a lo que muchos puedan pensar, un descanso en un momento inadecuado puede ser mortal y llevar a una ruptura catastrófica producida por la indiferencia. Si alguien nos necesita y está dispuesto a hablar con nosotros, hay que estar ahí. Nunca dejes que ese alguien se canse de esperarte y se de cuenta de que no te necesita para nada.

-La impaciencia.

Quizá no me equivoque si me atrevo a decir que este es un enemigo tan mortal como la rutina. El momento más difícil de tolerar es aquél en el cual debes considerar a tu orgullo propio y reflexionar si una reacción rápida es lo necesario, o lo mejor es esperar algunos minutos, horas o incluso días. Si tu novi@ no te llamó para saber cómo habías llegado a casa después del cine, no, no es necesario llamarle por teléfono esa misma noche. En cambio si crees que pudo haber un malentendido lo mejor es aclarar las cosas cuanto antes, para impedir que el problema crezca y -peor aún- se oculte detrás de una máscara de frágil indiferencia.

Aún así, es un grave error el querer juzgar a todos de la misma manera, por lo cual las anteriores palabras son tan solo pueden ser vagamente acertadas.

Al fin y al cabo, todos estamos enamorados del amor, como una persona me dijo un día. Y es ahora cuando una triste pregunta viene a mi cabeza: si dejamos que el amor ocupe un lugar en nuestra vida ¿en dónde queda la libertad?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

El amor es libertad, si no lo sientes así, tienes un problema.

Un saludo de tú admirador secreto.

Poesía, Sexo & Rebeldía dijo...

mi "admirador", quizas lo veas tu asi porque eres mayor de edad y tiens tu vida. Cuando un adolecente se enamora la libertad se achica, no olvides que lo que lees es sentido desde mi punto de vista. no es lo mismo que te enamores tu a que me enamore yo y mis padres corten salidas por miedo a ese amor.
Y porque sinceramenT no es lo mismo estar solo y sin tener que contar con algien que ya no ser una sola persona, y tener que compartir la mayoria de los momentos.

Anónimo dijo...

Hola, da igual la edad que tengas, todo lo que escribes, es cierto, es verdad y lo he vivido al igual que tú, pero tarde o temprano, te darás cuenta de que lo que has escrito, aunque sea verdad, no significa que estés enamorada, algún día comprenderás que eso no es amar y ser correspondido, no es sentirte enamorad@.
Algún día, encontraras a esa persona que te hará ser libre y saber que la libertad existe gracias a haber conocido y a poder estar con esa persona. No es cosa de películas ni nada por el estilo, solo te digo, que si encuentras a la persona adecuada, jamás te preguntaras donde esta tú libertad ni tendrás las dudas que has escrito es tú blog.
No se si me entenderás, no he querido decir que no sepas lo que es el amor, ni que no sepas lo que se siente al estar enamorad@, hay personas que aun pensando ¿dónde queda mi libertad? son muy, muy felices con la persona que tienen a su lado, yo he sentido lo que tú has escrito y te aseguro que he sido muy feliz, pero también te digo que he encontrado la libertad en el amor (por circunstancias que desconozco perdí ese amor que me dio la libertad, pero gracias a ella se que existe ese amor).
No quiero comerte la cabecita con esto, se que tú encontraras ese amor, por lo que escribes se que esta en ti, tú puedes dar ese sentimiento a otr@, tú problema y el de todos esta en poder encontrar la persona que te lo de a ti.
Mi problema es que yo tuve ese amor y ahora quiero volver a sentirlo, pero se que puedo ser muy feliz aunque no me sienta completamente libre, solo con sentirme amado ya sería feliz.
Discúlpame, el amor es amar y ser amad@, si sientes que amas y te sientes amad@, todo lo demás no importa.
Me he comido la cabeza intentando explicarte algo que no tiene explicación, si pones tú mano en mi pecho y sientes mi corazón, sabrás a lo que me refiero. (esto es una metáfora ¿o no?)
Vuelvo a repetirme, no he querido menospreciar lo que has escrito, yo mismo he sentido alguna que otra vez todo lo que has escrito en tú blog (menos el macarena).
Te entiendo, por eso intento que me entiendas y que no te pongas borde conmigo por lo que te he dicho en este comentario, te aprecio mucho.
Quería seguir intentando que entiendas lo que te intento explicar, pero solo la vida te lo puede hacer entender.

Un saludo de tú admirador secreto.

Tony dijo...

Brillante; has desnudado tu alma y has analizado tus sentimientos de una forma genial. No se quién eres pero describir así lo que sientes alivia mucho, te ayuda a mejorar y a ser más grande cada día.

Te iba a dar mi opinión sobre el amor pero es tan complejo que sería ridículo hacerlo, sólo creo que el mero hecho de que escribas acerca de lo que sientes es el paso más importante para conocerte y prepararte para la llegada del auténtico amor.

Te garantizo que existe y que lo encontrarás, no lo dudes, a lo mejor tarda un poco, pero verás tan claro ese momento cuando llegue que se te marcharán dudas y complejos.

Mientras llega, deja que la vida fluya en tus manos, siente cada momento y vive. Primero cumple con tus tareas diarias, haz deporte, cultiva tus aficiones (te ayudan a tener los pies en la tierra) y luego, en tus ratos libres, vive y comparte lo que tienes, lo que eres, lo que sientes con la gente que te rodea.

Ojalá te haya servido de algo esto que te he dicho, si no es así siempre me puedes poner a parir en mi blog, al que últimamente le dedico más tiempo de lo normal y creo que eso me está trastornando, jejejeje. ;-D